El mundo se nos va de las manos, la sociedad se nos va de las manos, si alguna vez estuvo en nuestras manos, hoy ya ha tomado un camino sin retorno, y aunque es paradójico somos consciente de ello. El triunfo de Trump planteó un antes y un después en la forma de hacer política, y no idealizamos con esto la forma de hacer política antes de Trump, porque no lo fue, ni lo ha sido, y el peor ejemplo podría ser el Nazismo de Goebbels, quien con el “miente miente que algo queda” sirve hoy de guía a este nuevo fascismo, más sofisticado y universal. Trump descaradamente utilizó las fake news, pero si antes se hacían, él las perfeccionó, las profesionalizó, utilizando los servicios de su archienemigo, o muy amigo, Rusia, un hecho más que probado. A esta forma de hacer política la exporto, a Europa primero, de donde nunca se había ido la extrema derecha pero que ahora con un aliado tan poderoso, con una máquina imparable de hacer fake news, ya podría empezar a moverse la izquie...
Espacio de discusión y planteo de alternativas reales de cambio a este mundo injusto y desigual.